“Ganar, ganar y volver a ganar” es la frase que se oía en el Calderón antes del partido contra Barcelona y tras de 93 minutos de lucha, compromiso, entrega, inteligencia, talento, y fútbol, el estadio estalló de alegría. Bajo el mando del ‘Cholo’ Simeone, el equipo colchonero se sitúa en semifinales de la Liga de Campeones luego de cuarenta años.
El conjunto rojiblanco es un gran equipo, al margen de estrellas, pues solo así se explica que dejara fuera al Barza sin dos de sus figuras -Arda Turan y Diego Costa- y tras un gran desgaste físico por la extenuante temporada en el que cada partido ha sido como una batalla.
Desde un inicio el Atleti salió con todo, como si tuviese que remontar un resultado adverso. A los cinco minutos, Adrián remató contra el poste, el rebote le cayó a Villa, que centró nuevamente para Adrián, quien de cabeza mandó la pelota hacia el otro palo, justo para que entre Koke y fusilara a Pinto.
El equipo catalán sufrió para frenar la verticalidad colchonera, superar su presión adelantada y para equilibrar su intensidad y agresividad. Koke, Adrián y Villa debelaron las falencias defensivas del Barcelona que a los 18 minutos ya había recibido tres disparos a los postes.
Pasada la media hora de partido, el Barcelona empezó a mostrar su juego tocando en el campo rival, pero el compromiso en defensa del equipo de Simeone impidió que el conjunto azulgrana generara ocasiones de gol. Solo un cabezazo de Messi, que pasó rozando el palo, fue la mejor ocasión culé del primer tiempo.
Tema aparte la actuación de Neymar, quien fue el mejor de los suyos en la primera mitad. La huacha que le hizo a Tiago fue de otro partido, un regalo a la afición blaugrana que sufría con el desempeño de su equipo.
El descanso le sirvió al Atleti para tomar un segundo aire pues sabían que el Barcelona se vendría con todo en la segunda mitad y no se equivocaron: el conjunto de Martino se adueñó del balón, subió la intensidad y estuvo a punto de marcar hasta en 3 ocasiones.
Cuando parecía que el Atlético se estaba quedando sin fuerzas, la entrada de Diego le dio oxígeno, pudiendo sentenciar la serie de no ser por Pinto. El Barça nunca pudo encontrar a Messi y utilizó en exceso los centros que no hicieron daño a la sólida defensa rojiblanca. Así, los locales consumirían los últimos minutos del encuentro, sacando a los catalanes de su séptima semifinal de Champions League consecutiva.
Con la actuación de su equipo, Simeone se encuentra entre los cuatro mejores técnicos de Europa. El argentino ha sabido construir un equipo campeón donde todos los futbolistas son obreros y se sacrifican por el colectivo. “Lo importante es el equipo”. Con esta filosofía, el Atlético ha logrado una gran hazaña y disputará las semifinales de la Champions. Y en la Liga, a falta de seis jornadas, todavía son líderes. Felicidades a todos los colchoneros.
@PauAlvarado24
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