Todo se definirá en Stamford Bridge. Atlético de Madrid y Chelsea dejaron todo para la vuelta y no se hicieron daño en el primer partido de semifinal de la Champions. En un duelo en el que los rojiblancos fueron los únicos que buscaron el gol, ninguno de los dos pudo marcar la diferencia y será el encuentro del próximo miércoles el que decida el finalista.
En un partido en que ambos equipos tienen similitudes, quedaba por ver cuál de los dos tomaba la iniciativa. Pero aquello quedó develado cuando se dieron a conocer las alineaciones. Mourinho sorprendió incluyendo a Mikel en el medio, dejando en la banca a Oscar y dando la titularidad a Fernando Torres.
El “Niño” regresaba a casa siendo titular ante el equipo de su vida, pero fue víctima del planteamiento del portugués que con un 4-1-4-1 que se convertía a veces en 4-5-1, mandó a Torres a luchar solo contra el mundo, a 40 metros del resto del equipo y esperando pescar algún balonazo que nunca llegó.
El escenario no sorprendió a Simeone, quien puso en el once titular a Diego, capaz de filtrar un pase por algún espacio o hacer una jugada de otro partido como contra el Barcelona, pero no fue suficiente. Al equipo de Madrid se le acababan las ideas pasando los tres cuartos de cancha rival y solo atinaba a tirar centros que eran despejados uno a uno por el muro inglés.
A los 17 del primer tiempo llegó una jugada que pudo cambiar el partido, Petr Cech y Raúl García se chocaron en un tiro de esquina, dejando al arquero fuera de combate, pues en la caída se luxó el hombro derecho. El checo no pudo continuar y fue sustituido por el veterano Mark Schwarzer
Conforme avanzaba el tiempo, se hacía más notorio que ambos equipos esperaban un contragolpe para resolver con una genialidad individual, más que con ganas de generar alguna oportunidad, provocando que el partido se hiciera lento y monótono. Además del tiro de esquina de Koke, poco más hizo el Atlético en el área rival, solo un par de remates a distancia, uno de Mario Suárez y otro de Diego. Eso le bastó para ser más que el Chelsea que no generó peligró en toda la primera etapa.
En la segunda parte, la entrada de Arda Turan le dio frescura al Atleti que estuvo cerca de anotar dos veces, con un remate de Gabi y un cabezazo del turco que se marchó desviado por muy poco. Del otro lado, Torres no llegó a inquietar a Courtois. El delantero español solo intentó un remate que fue directo a las manos del arquero rival. También amenazó David Luiz con un tiro libre, pero el brasileño tampoco pudo cambiar la historia del encuentro.
Sin impresionar a nadie, el Atlético de Madrid fue el único equipo que intentó ganar el partido. No lo logró, pero tendrá otra oportunidad y quizás el empate lo ayude en su hazaña. Lisboa está más cerca, está a solo un paso.
Paula Alvarado
@PauAlvarado24
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